La fiscal de Lomas de Zamora, Viviana Giorgi, pidió la pena de 7 años de prisión para el ex portero del tradicional “Colegio Parish Robertson” de Monte Grande, quien está acusado de abuso sexual y grooming (acoso a través de redes sociales). La víctima fue una alumna de ese establecimiento.
Se dio en el marco de un juicio abreviado, un proceso judicial en que las partes acuerdan una pena y un tribunal oral la avala y se aplica. Ahora, resta saber si la defensa del imputado aceptará la pena propuesta por la fiscal. En tanto, la palabra final sobre la posible condena la tendrá el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 4 de Lomas de Zamora. La causa que juzga al ex portero, Ramón Espíndola, con una carátula titulada “Abuso sexual agravado por tratarse el autor encargado de guardia en concurso real con grooming”.
Según señalaron fuentes judiciales, los cargos que recaen sobre el acusado corresponden a situaciones de abuso y grooming sucedidas entre julio y diciembre de 2018 a una alumna que en ese entonces tenía 14 años.
De acuerdo a la imputación, Espíndola habría abusado sexualmente de la menor en el laboratorio del colegio de Monte Grande. En ese sentido, la fiscal Verónica Pérez, de la UFl N° 3 de Esteban Echeverría, determinó también que el portero le enviaba a la alumna mensajes vía WhatsApp, fuera del horario escolar, para pedirle que lo llame y le envíe fotografías. De acuerdo a la denuncia original, también usaba ese medio para invitarla a salir del aula para encontrarse.
La detención se llevó a cabo en enero de 2019, luego de que la fiscal evaluara tanto el testimonio de la víctima en Cámara Gesell como el peritaje de su teléfono celular. Pocos días más tarde, el juez Maffucci Moore hizo lugar a la excarcelación de Espíndola, impidiéndole el acercamiento a la menor denunciante.
Tras la detención de Espíndola, se sumaron testimonios de ex alumnas que indicaron que el portero las abrazaba y les “mordía la oreja”. En este sentido, las ex alumnas afirmaron que comenzaron a esquivarlo por sentirse “avanzadas” por el portero.
Precisamente, la detención de “Ramón” generó mucha conmoción en la comunidad educativa del colegio de Monte Grande, ya que se trataba de un hombre muy querido en la institución, que recibía mucho cariño por parte de estudiantes, ex estudiantes y familiares de los estudiantes del Instituto Parish Robertson.