Mar del Plata: Estudiantes proyectan un satélite pequeño para analizar la pesca ilegal

Anuncios
Logo Inteligencia Natural

Estudiantes del Instituto Industrial Pablo Tavelli de Mar del Plata buscan construir un satélite del tamaño de una lata de gaseosa, que pueda utilizarse para evaluar el impacto de la pesca en la milla 201. La iniciativa fue seleccionada por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (MinCyT) y la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae), para que el dispositivo esté listo en poco más de tres meses para su lanzamiento desde el Centro Espacial Teófilo Tabanera, en Córdoba.

El proyecto de este grupo de estudiantes secundarios, llamado TAV-LIGHT 1, prevé la construcción de un dispositivo de menos de 200 gramos de peso (picosatélite), que una vez lanzado sea capaz de reunir información atmosférica y aportar datos para analizar, entre otras cuestiones, cómo afecta a la fauna marina la contaminación lumínica producida por los cientos de buques que operan en el límite de la Zona Económica Exclusiva (ZEE).

La propuesta fue presentada en el marco del proyecto Cansat, una convocatoria internacional impulsada por la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio estadounidense (NASA) y la Agencia Espacial Europea (ESA), que a nivel nacional es llevada adelante por el MinCyT y la Conae con el objetivo de acercar la ciencia y la tecnología a los alumnos de escuelas secundarias, y fue seleccionada entre casi 500.

Anuncios
Logo Inteligencia Natural

El proyecto TAV-LIGHT 1 propuso también que el dispositivo pudiera evaluar también el impacto de la pesca ilegal e indiscriminada frente a las costas marplatenses, con el foco puesto en dos cuestiones: la contaminación lumínica de la flota que opera sobre la milla 201 y el efecto de la actividad a gran escala sobre el recurso ictícola. Además, otro objetivo eventual es aportar información sobre el posicionamiento de los buques que operan en el límite de la ZEE.

El proyecto prevé que los resultados obtenidos sean compartidos y comunicados a instituciones, organismos o grupos de investigaciones vinculados al área.

Tras la selección del proyecto para la siguiente etapa, los estudiantes recibieron un kit de componentes electrónicos, de comunicación y telemetría, y sensores lumínicos y de humedad por parte de la Conae, y deberán correr contra el calendario para ensamblarlos y darle forma al picosatélite. AP

Compartilo en tus redes sociales